ULTIMO AMANTE

Te espero bella, joven anciana
Mientras voy ensuciandome,
El lodo confunde mi deseo con la piel,
El sexo con la vida, la fama,
Y la fama con la muerte triste.
Cada suspiro es una nube gris,
Cada dolor un angel que se anuncia,
La atronadora trompeta celeste un orgasmo.
Las lágrimas único fruto de lo extremo.
Bella anciana, siempre joven, cercena ya
Hurtame al dolor de gozar para olvidar,
Se certera y hunde tu deseo en mi cuerpo,
Hazme llegar al paraiso sin carne,
Al valhala de almas sucias y bellas
Un limbo donde olvidar el deseo.

Tiemblo estremecido en tu cielo
Necesito el filo de tu guadaña,
Ser abierto como ofrenda a Eros
Desangrado de mis miedos, mis anhelos.
Llévame entre plumas de seda rosa
Quiero ser ajusticiado, por reo confeso,
Culpable de ser amado y amar
Y de buscar, siempre, sin encontrar.
Arráncame los ojos, que pueda ver,
Tocar los sentimientos de mis amantes
Acunarlos, acariciarlos y dormir
Eternamente en la nada, como he solido
Siempre la nada, buscandolo todo.

Recuerdo, recostado en mi memoria,
Aquéllos días de nardo y noches de jazmín,
Embriagado de madrugadas y amores,
Noches de brisa fresca y desnudez,
Melocotones en la piel y aromas a canela,
Labios de seda y amenazante sexo,
Amaneceres rotos por un indiscreto sol,
Bostezos de  molicie en tu fuente de placer
Cuerpos sacrificados en el altar de la castidad.
Recuerdos para que te lleves en tu filo,
Que sonrias cuando entregado, una vez más,
Te acompañe, mi ultima y fría amante.