Luz de luna apagada,
Escondida luna acharada,
Avergonzada;
Hombres sin alma.
Maldito creciente sin calma,
Lagrimas acidas, muerte callada
En tierra de sangre regada.
Negra luna de muerte esparcida
En mundo cruel,
De hombres brutales,
Oración refinada,
Corazón de hiena, mirada alargada,
Espesa saliva
Ideas malvadas.
Turbios claros de luna
Faltos de amor,
De poesía,
De
compasión, de alegría.
Rayos candentes y helados,
De crueldad medida,
Intención malsana;
La más feroz insanía
Bajo una luna perdida.
Mundo convulso,
Regado de llanto de luna
Cada noche, cada día, cada nada.
Paz perdida, guerra buscada
En nombre de un dios ausente de vida,
Que como un Cid resucita
En la mente de un loco,
En la cabeza de un cuerdo,
En pueblos desiertos de vida
De amor;
Feraces de muerte, de odio,
De revanchas rebosantes,
De resentimientos enlosados,
De ojerizas asfixiados.
Luna triste y gris devastada,
Por miradas sucias de hombres
Que su luz no abarca.
Luna desesperada de dar luz de noche
A hombres sin bondad en su alma,
Sin piedad en sus ojos
Y de cruel espada.
Luna desencantada de inspirar amores
Donde el amor ya falta,
Y la muerte se pasea
Orgullosa de su reino;
En un mundo sin hombres
Solo espectros que pasean
Un cuerpo lleno de rabia.
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